Es posible que seas un escéptico en relación a cualquier tipo de ritual o mecanismo energético o espiritual. Esto evidentemente podría hacerte dudar en relación a la escogencia del Feng Shui como elemento ideal para la decoración. Sin embargo, más allá de las disposiciones dogmáticas, el feng shui puede otorgarte muchísimas herramientas para lograr una organización perfecta de los elementos del hogar.
El feng shui es un sistema filosófico milenario surgido en China, cuyo propósito es generar la disposición armónica ideal en los espacios para la correcta fluctuación de las energías de la materia por los distintos lugares. Esta es una suerte de actividad científica que a través de ciertos preceptos, genera cambios físicos que a su vez producen cambios espirituales.
Ahora bien, más allá de si crees o no en la eficacia del feng shui, este puede ser un gran aliado para tu vida si eres un desordenado empedernido. Por estas razones, aquí te dejamos una serie de preceptos que establece esta forma de decoración.
La limpieza como pilar
Si hay algo que genera molestias explícitas y tácitas en una casa, es el sucio. El polvo, las manchas, la acumulación de insectos muertos, los pegotes y el desorden en general puede hacer de la estancia en tu morada, una verdadera pesadilla, por no hablar de la mala impresión que generas en los visitantes. Por este motivo, es necesario que empieces por hacer una limpieza exhaustiva en tu hogar y que lo mantengas como un hábito.
El punto de encuentro: la sala de estar
Este espacio suele ser uno de los centros de la casa, el lugar propicio para el encuentro, para las conversaciones, para la convivencia, así que es prudente que utilices una decoración que exhorte precisamente el compartir. Ubica los sofás formando un ángulo de 90º de manera que las conversaciones se puedan llevar fluidamente. Coloca una pequeña mesa como epicentro, esto ayudará, de alguna manera, a mantener el foco de las reuniones. Trata de no poner el televisor como protagonista del espacio. Si tienes una chimenea, ubica los muebles en torno a ella.
Tu dormitorio es para descansar
La cama es el elemento principal de este espacio, cuya función esencial es el descanso. Evita a toda costa tener televisores aquí, ya que esto te distrae y te quita tiempo de recuperación. Por otro lado, procura no tener tu dispositivo móvil en la mesilla de noche o sobre la cama. Descansa y no estés pensando en todo lo que pasa afuera.