Los alquileres de larga estancia, una alterativa para muchos propietarios

La península se ha consolidado como un destino turístico internacional de primer nivel y todas las ciudades tipo Barcelona, Madrid y Sevilla, están desarrollando un modelo de alquiler, basado en el alquiler turístico, debido al gran flujo de turistas que estas ciudades experimentan.

No obstante, aunque en los centros de estas ciudades están aumentando los pisos de alquiler turístico, hay otra realidad y es que muchos propietarios e inversores que se metieron en alquiler sus pisos para cortas estancias de turistas, están abandonando este modelo de negocio por la complejidad que conlleva su gestión.

Debemos de tener en cuenta que un alquiler turístico exige al propietario  tener dado de alta su actividad, a estar sometido a los controles de los distintos organismos locales y autonómicos y además si no lo gestionamos nosotros mismos, tenemos que dedicar una parte de los ingresos a que lo gestione otra persona o empresa especializada en la gestión de pisos en régimen de alquiler turístico.

Además se estaba dando la situación en las ciudades ultraturísticas antes mencionadas, que se estaban abriendo pisos de alquiler turístico en zonas donde los turistas no iban, y esto causaba al final un grave perjuicio económico a los dueños del inmueble.

Ante esta realidad, son muchos los propietarios que en 2018 están volviendo a poner sus pisos de alquiler de larga duración, ya que así le sacan mayor rentabilidad a sus viviendas.

Hay que tener en cuenta que en un piso de alquiler de larga estancia, el inquilino corre con los gastos de luz, agua y gas, mientras que en el alquiler vacacional esos gastos corren de nuestra cuenta. Si echamos números, puede que el alquiler turístico no sea tan lucrativo como se pensaba.

Además, muchos propietarios se han visto sorprendidos con que las comunidades de vecinos se han opuesto a este uso del inmueble y han debido de cesar la actividad.

Nuestro consejo es que si eres propietario de una vivienda, y le quieres sacar rentabilidad, evalúa venderla antes de alquilarla a turistas, puede que así saques un mejor precio a la larga, más que meterte en costosas operaciones de alquiler turístico.

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