¿Estás harto de las baldosas y azulejos de tu cocina o baño? Si quieres ahorrar dinero, y darle una nueva imagen a estas estancias del hogar no te pierdas el post de hoy, porque en Finques Ollé, te damos consejos de primera mano para cambiar fácilmente el color de las paredes sin tener que hacer aparatosas reformas ni obras a casa.
Empieza con la limpieza
Si tienes vinilos o elementos decorativos en las paredes, tendrás que deshacerte de ellos y empezar en profundidad con la limpieza. Para ello, tendrás que limpiar la superficie que quieres pintar con agua y jabón con un trapo húmedo o bayeta, hasta que se elimine la grasa y cualquier otro tipo de suciedad. Después de secar los azulejos con un trapo limpio, tienes que evitar manchar de pintura tu mobiliario, tus paredes o el suelo. Cubre los bordes con cinta de pintor, sobre todo, comprueba que hayas aplicado bien la cinta, puesto que de este modo evitaremos limpiar de nuevo o repasar de nuevo los azulejos.
Ponle color
Antes de darle color, tendrás que darle una capa de un fondo fijador, primero en las juntas y después en el resto con un rodillo -recomendamos el rodillo de cabellos cortos-, con este producto conseguirás que después la pintura se adhiera mejor a la cerámica de los azulejos. Una vez se ha secado el fondo fijador, ya podrás empezar aplicando una capa de pintura especial para azulejos. Déjalo secar, y si lo prefieres puedes darle otra capa de pintura. Este tipo de pintura es muy resistente y es repelente al agua y el polvo, por lo cual, si se conserva en buen estado, no hará falta volver a pintar tus azulejos. Una vez secada la pintura, retira con cuidado la cinta de pintor y…ya tienes tu nueva cocina o nuevo baño en cuestión de horas!
Qué te parece la idea? Te atreves a pintar tus azulejos?