Tener un salón elegante donde la visita se sienta cómoda requiere de ciertos detalles. Si deseas renovar ese espacio con poco presupuesto y tiempo, sigue estos consejos:
Organiza los muebles
Para que el espacio luzca agradable y atractivo, distribuye los muebles de manera que puedas caminar por el salón sin ningún problema. Sobre la mesa del juego de muebles, puedes colocar un juego de flores sencillos, adornos de cerámica o algunos portarretratos.
Dale color al suelo
Si el espacio tiene tonos neutros, quizás el ambiente se vea demasiado aburrido, puedes comprar alfombras coloridas, con distintas figuras que le darán vida a tu salón.
No te olvides de las paredes
Decóralas o píntalas, no es necesario que elijas colores demasiado llamativos, los tonos claros también le dan un toque elegante a los espacios de tu hogar. Si quieres ahorrar tiempo y dinero, elige una sola pared para decorarla y hacer que resalte del resto.
Incluye elementos que llamen la atención
Un cuadro, una obra de arte, una silla antigua, una estatua o un candelabro puede ayudarte a decorar la sala. No es necesario que vaya en sintonía con los demás objetos, lo importante es que exista algo en común como el color, la textura o el tipo de material.
Aprovecha las tiendas de segunda mano
Aunque no lo creas, en este tipo de tiendas se consiguen objetos en buen estado y lo mejor es que puedes ahorrarte dinero ya que los precios son muy económicos. Además, si te gustan los detalles vintage, sin duda las tiendas de segunda mano son tu mejor opción.
Los cojines no pueden faltar
Si tus muebles son de color neutro, puedes incorporar cojines coloridos y darle un ambiente más divertido a tu salón. Por lo general, las almohadas grandes son más fáciles de mantener en orden con respecto a las pequeñas, así que para que tu trabajo sea más fácil opta por la primera opción. Eso sí, ten cuidado de mezclar el estampado de tus cojines con las cortinas de la sala porque puede generar cierto desequilibrio.
Utiliza espejos
Nada mejor que tener un espejo en la sala, seguro a tu visita le encantará. Además, le aporta mucha elegancia, estilo y da la sensación de amplitud. Puedes colocarlo en la pared justo frente a una ventana, así se reflejará la vista de afuera. Otra opción es uno que ocupe toda la pared y elaborar un marco tú mismo.
