La arquitectura moderna apuesta por los espacios abiertos e integrados, no solo en las partes internas de los pisos, también en los espacios externos. Por esta razón, la mayoría de los edificios están diseñados con grandes ventanales transparentados que permiten vislumbrar toda la parte interna de los pisos. A nivel estético, esta tendencia ha cobrado gran aceptación, sin embargo, tiene como fundamental contraargumento la afrenta a la privacidad, cualquier atisbo de intimidad se ve afectado. Ante esta situación, es necesario acudir a la instalación de cortinas, por eso, aquí te dejamos una serie de tips para ayudarte a hacer la selección más adecuada.
El color es vital
Las cortinas suelen ser un filtro de la luz, así que, cuando estén cerradas, todo tu inmueble lucirá justo del tono que elijas; por tanto, debes ser cuidadoso a la hora de seleccionar su color. Visualiza bien el resto de tu decoración y el color de las paredes, busca una tonalidad de la paleta de colores que haga juego. Del mismo modo, no dejes de tomar en cuenta la psicología del color: si quieres generar un clima de paz, descanso y espiritualidad, te sugerimos las tonalidades cremas, lilas o blanca.
La tela hará la diferencia
Tienes que estar muy consciente de la cantidad de luz que entra por el ventanal, esto también dependerá del tipo de papel ahumado que tengan los vidrios. Procura elegir una tela que pueda resistir al sol a largo plazo y que conserve la claridad en tu casa al tiempo que resguarda tu intimidad, para esto te sugerimos el lino la seda o el terciopelo.
El tamaño es de gran importancia
No hay nada que luzca peor que una cortina que no esté en proporción con el espacio de los ventanales. Antes de hacer cualquier inversión, más vale que tomes bien las medidas y adaptes las telas al espacio. Busca también un sistema fácil de colgar y descolgar, no querrás sufrir cada vez que debas lavarlas.