Ahora que el mercado inmobiliario ha repuntado y que la compra de viviendas tiende a incrementarse, muchas personas se preguntan qué tipo de interés resulta más conveniente al momento de pedir una hipoteca. Aquí aportamos algunos datos que pueden ayudarte con tu decisión.
Tipo de interés fijo
Entre los argumentos de quienes se inclinan por este tipo de interés se encuentran:
1.- La media del Euríbor, desde su creación, ha sido de 2,51%, por lo que, aunque ahora se encuentre por debajo de 1% (aproximadamente en 0,159%), su tendencia parece ser de subir a largo plazo.
2.- Quienes recomiendan optar por este tipo de interés advierten que no debe negociarse por encima de 3%, incluso puede conseguirse por debajo de 2% pagadero en 15 años.
3.- La principal ventaja de este tipo de interés es la tranquilidad de saber que se pagará lo mismo desde el principio hasta el final y en el camino no habrá sorpresas desagradables.
Tipo de interés variable
1.- Es la más atractiva en estos momentos tras caer el Euríbor en niveles negativos.
2.- Resulta la más recomendable si se pide una hipoteca a corto plazo.
3.- Puede negociarse una “cláusula techo” que te proteja contra alzas imprevistas.
4.- Con este tipo de interés hay que tener en cuenta que mientras más bajo sea el diferencial, mayores serán las condiciones que imponga la entidad bancaria.
Tipo mixto
Este es el tipo de hipoteca que combina dos tipos de intereses: variable y fijo. Estas ofrecen un tipo de interés fijo durante los primeros diez años calculado entre 1,3 y 2,25%. Pasado ese tiempo se comienza a pagar con tipo de interés variable. Hay que precisar que con este tipo de hipoteca el comprador no se beneficia durante los primeros años de los niveles negativos del Euríbor, tal y como ocurre en la actualidad.