Si hay algo que está ahora de moda y en auge por muchos sentidos es la reutilización y el reciclaje. Y sí, en los adornos navideños también se aplica. Seguro que has visto muchas tiendas que venden elaboradas y preciosas coronas para la puerta. Tal vez no te has planteado que con materiales tan sencillos como tapones de corcho, bolas de hilos, retales de telas… puedes fabricarte las tuyas propias y, además, disfrutar confeccionándolas con tu pareja o hijos.
Guirnaldas y bolas caseras
Estos elementos también son otros clásicos de la Navidad. Pero tanto las bolas como las guirnaldas ofrecen un sinfín de posibilidades creativas. Reutiliza viejas pelotas de tenis, enrolla papel de plata y luego decóralo, ve al campo a por piñas y haz con ellas guirnaldas, compra pequeños cascabeles y únelos, junta diferentes tipos de abalorios, hasta puedes buscar por internet diseños, imprimirlos y pegarlos para hacer bellas y únicas tiras.
¿Te fascinan los muñecos de nieve? Es normal, pero debes saber que puedes hacerlos en tu propia casa con latas, vasos de plástico, cajas, bolas de hilo y con muchas otras cosas que se te ocurran.
Las latas de refrescos, e inclusos las famosas cápsulas de las cafeteras son fantásticas para fabricar adornos navideños. E incluso los engranajes de viejos relojes y otros objetos similares debidamente colocados en el árbol darán un toque realmente personal. Otra forma de personalizar el árbol es que cada miembro de la casa coloque algo que tenga un significado especial.
¡Dar un toque especial a tu hogar puede ser divertido!