Conseguir una casa lo suficientemente espaciosa, bien ubicada y correctamente distribuida, con todas las disposiciones estéticas, con materiales de calidad y además a un precio relativamente asequible, suele ser un enorme reto para las familias numerosas, con mayor necesidad de espacio. Por estas razones, en el presente artículo dejamos algunas sugerencias para lograr una buena distribución de los hogares, antes y después de adquirir la propiedad.
Lo que debes tener en cuenta antes de comprar
En los tiempos actuales, en algunos diseños arquitectónicos parecen predominar los aspectos estéticos antes que los fundamentos prácticos, razón por la cual se están ejecutando diseños de gran valor visual, pero que representan una importante inconveniencia de espacio, en especial para las familias numerosas. Así que, cuando visites una vivienda no te dejes deslumbrar por la exuberancia del diseño y repara en la necesidad de buenos espacios. No necesitas grandes cuartos de baño, sino grandes habitaciones. Evita adquirir viviendas con armarios muy espaciosos o vestidores. Procura seleccionar lugares integrados, sin tantos muros divisorios que resten espacio.
Genera espacios en lugares pequeños
Si ya has comprado una vivienda con una mala distribución de los espacios, aún tienes manera de poder generar sensación de amplitud y sacar el máximo provecho de cada metro cuadrado. Para lograrlo, trata de adquirir un mobiliario multifuncional que permita que el mismo objeto sea utilizable de distintas maneras. Si las normas de tu comunidad de propietarios lo permiten, involucra los espacios, es decir, echa paredes abajo y unifica las habitaciones. Usa literas en los dormitorios y juega con las ilusiones ópticas de la decoración, los colores claros siempre generan una atmósfera más amplia, al igual que la ubicación de espejos en lugares puntuales de la vivienda. Del mismo modo, utiliza ventanales grandes que permitan suficiente entrada de luz, es vital la luz natural para ganar amplitud.
