La primavera generalmente viene acompañada por una necesidad de transformación radical.
Salimos del frío petrificante para disfrutar la calidez del sol, nos olvidamos de las infinitas capas de
ropa para andar ligeros por la vida, descansamos de la calefacción, abrimos las ventanas y
buscamos llenar todos los espacios de colores y flores alegres que nos inspiren. Si estás en esta
onda, sigue estos prácticos consejos y haz que tu casa florezca en pocos pasos:
● Deja que el aire fresco invada tu hogar. Aprovecha el cambio de clima para abrir las ventanas
completamente y sacar el olor a humedad del invierno. Llena de flores los espacios y disfruta
la mezcla de aromas que comenzarán a invadir tu casa.
● Limpia absolutamente todo. Organiza tu fin de semana para hacer una limpieza profunda y
cambia de posición todos los muebles para renovar la energía.
● Saca todo lo que no uses. Mientras guardas la ropa de invierno y sacas la de primavera,
observa cuáles son las prendas que llevas tiempo sin usar –por viejas o rotas- y colócalas
aparte. Dejarlas en el armario te dará la sensación de tener mucho, pero al final terminarás
repitiendo siempre lo mismo. Hazlo también con las sábanas, los muebles y los objetos de
decoración.
● Lleva el color a tu hogar. Una vez que sacaste todo lo que no usas y abriste espacio a lo
nuevo, cambia la decoración de invierno por la frescura de la primavera. Sustituye los
pesados textiles que daban calor por unos más ligeros y frescos, preferiblemente de colores
claros o vivos.
● Siéntate y disfruta. Aprovecha este momento para detallar todo y analizar si hacen falta
comprar nuevos elementos decorativos o no.
Aprovecha la frescura de época hacer sacar todo lo que usas, abrir espacio a lo nuevo y hacer
que tu hogar florezca nuevamente. Nada mejor que un espacio limpio y diferente para volver a
comenzar.